martes, noviembre 23, 2010

...Y UNA MAÑANA...



Jamás pensamos nunca
en el invierno,
pero el invierno llega,
aunque no quieras.
Y una mañana gris
al abrazarnos,
sentimos un crujido
frío y seco,
cerramos nuestros ojos
y pensamos:
Se nos rompió el amor
de tanto usarlo.